Denuncia falsa: consecuencias penales y cómo defenderse

Denuncia falsa: consecuencias penales y cómo defenderse

Ser acusado de un delito que no se ha cometido es una de las situaciones más graves y angustiosas a las que puede enfrentarse una persona. Las consecuencias no solo afectan al ámbito penal, sino también a la vida personal, familiar, laboral y reputacional del denunciado. En España, interponer una denuncia sabiendo que los hechos son falsos no queda impune: constituye un delito recogido en el artículo 456 del Código Penal, conocido como delito de denuncia falsa.

Esta figura penal protege tanto a las personas injustamente acusadas como al propio sistema judicial, evitando que se utilicen los tribunales con fines maliciosos o revanchistas. Ahora bien, no toda denuncia que acaba en archivo o absolución puede considerarse falsa. La ley exige que se pruebe que quien denunció lo hizo a sabiendas de que los hechos eran falsos o con desprecio hacia la verdad lo que implica una valoración jurídica precisa y pruebas contundentes.

En este artículo te explicamos de forma clara y sencilla cuándo se considera que una denuncia es falsa, qué consecuencias legales tiene para quien la presenta, y cómo puedes defenderte si has sido víctima de una acusación injusta. Asimismo, analizaremos cómo distinguir esta figura de otras parecidas, como la simulación de delito, y qué pasos debes dar para reclamar justicia.

¿Qué se entiende por denuncia falsa?

La denuncia falsa es una acusación presentada ante la policía, un juzgado o el Ministerio Fiscal en la que se atribuye a otra persona la comisión de un delito a sabiendas de que dicha acusación no se corresponde con la realidad. No basta con que el proceso penal termine archivado o con una absolución: lo determinante es que quien denuncia lo haga sabiendo que los hechos nunca ocurrieron.

Para que una denuncia falsa sea considerada como delito, deben cumplirse todos los siguientes requisitos:

  • Existencia de una denuncia formal ante una autoridad competente (por ejemplo, policía, juzgado o fiscalía).
  • Que se atribuyan a una persona la comisión de unos hechos que, de ser ciertos, serían constitutivos de delito.
  • Que exista resolución judicial firme (sentencia absolutoria o sobreseimiento libre) que confirme que la persona denunciada no cometió los hechos.
  • Que se demuestre que el denunciante sabía que lo denunciado era falso, o que actuó de forma claramente negligente respecto a la veracidad de los hechos imputados.

Así lo establece el artículo 456 del Código Penal, que castiga a quien «con conocimiento de su falsedad o temerario desprecio hacia la verdad, imputare a alguna persona hechos que, de ser ciertos, constituirían infracción penal».

Por ejemplo un empresario presenta una denuncia penal contra un antiguo socio, acusándole de haber sustraído 15.000 euros de la caja de la empresa. Aporta una factura manipulada y declara que fue testigo directo del hecho.

Durante la investigación, se acredita que el supuesto robo nunca ocurrió: la factura era falsa, los libros contables no presentan descuadres y hay correos que muestran que el denunciante sabía que ese dinero se usó para fines de la sociedad. El procedimiento se archiva por sobreseimiento libre, al quedar claro que los hechos denunciados no existieron.

Con la resolución firme, el socio acusado interpone una querella por denuncia falsa, alegando que su exsocio fabricó pruebas y mintió ante el juzgado con el objetivo de perjudicarle y forzar una ventaja en una disputa mercantil paralela. Si se acredita el dolo del denunciante, este podrá ser condenado por un delito de denuncia falsa conforme al artículo 456 del Código Penal.

¿Cuáles son las penas por una denuncia falsa?

Las penas por denuncia falsa varían en función de la gravedad del delito imputado falsamente. Según el propio artículo 456.2 del Código Penal, se aplicarán:

  • Pena de prisión de seis meses a dos años y multa de doce a veinticuatro meses si se acusa de un delito grave (por ejemplo, una violación, un homicidio o un robo con violencia).
  • Pena de multa de doce a veinticuatro meses si se imputa un delito menos grave (estafa, lesiones leves, delito de amenazas)
  • Pena de multa de tres a seis meses si se imputa una infracción leve (daños leves a la propiedad)

Además, quien interpone una denuncia falsa puede ser condenado a resarcir civilmente a la persona perjudicada, mediante el pago de una indemnización por daños y perjuicios, conforme a lo previsto en el Código Penal. Asimismo, podrá imponérsele el abono de las costas procesales si así lo acuerda el tribunal en sentencia.

Por otro lado, la condena por este delito genera antecedentes penales, lo que puede tener consecuencias jurídicas relevantes, como la imposibilidad de acceder a determinados empleos públicos o privados que exijan certificado negativo de antecedentes, o la pérdida de ciertos beneficios penitenciarios en caso de reincidencia.

¿Cómo demostrar que una denuncia es falsa?

Demostrar que se ha interpuesto una denuncia falsa no es sencillo. Se necesita una resolución firme que declare la inexistencia del delito atribuido y, en muchos casos, que la acusación se realizó de forma dolosa o temeraria. No basta con que el acusado sea absuelto: debe acreditarse la falsedad de los hechos y la intencionalidad del denunciante.

Por eso, si has sido víctima de una denuncia falsa, es importante reunir todas las pruebas posibles:

  • Grabaciones, mensajes, correos electrónicos u otros elementos que contradigan el relato del denunciante.
  • Pruebas testificales que puedan respaldar tu versión.
  • Informes periciales o pruebas documentales que desmonten los hechos imputados.

Una vez que exista sentencia absolutoria o archivo del procedimiento, se podrá presentar una querella por denuncia falsa contra quien interpuso la acusación.

¿Cuál es el plazo para denunciar una denuncia falsa?

El delito de denuncia falsa prescribe a los cinco años desde que se dicta resolución firme que declare la inexistencia del delito imputado. Por tanto, el tiempo empieza a contar no desde que se interpone la denuncia, sino desde que se confirma judicialmente que era falsa.

Es importante actuar con rapidez, ya que preparar una querella bien fundamentada puede requerir tiempo y el apoyo de un abogado penalista experimentado.

Diferencias entre denuncia falsa y simulación de delito

El delito de simulación de delito, regulado en el artículo 457 del Código Penal, se diferencia de la denuncia falsa en un elemento esencial: no se imputa el delito a otra persona, sino que se finge haber sido víctima de un delito inexistente.

Por ejemplo, una persona que denuncia un robo que nunca ocurrió para obtener una indemnización del seguro comete simulación de delito, no denuncia falsa.

Ambas figuras comparten que buscan engañar a la autoridad y provocar una actuación procesal indebida, pero:

  • En la denuncia falsa se perjudica a un tercero, atribuyéndole un delito de forma dolosa.
  • En la simulación de delito no se señala a nadie en concreto, sino que se movilizan recursos judiciales de forma fraudulenta.

¿Cuáles son las consecuencias para la víctima de una denuncia falsa?

Quien sufre una denuncia falsa puede experimentar consecuencias graves, incluso aunque finalmente se le exonere penalmente. Entre las más frecuentes se encuentran:

  • Apertura de un procedimiento penal que obliga a comparecer ante la justicia, con las implicaciones personales, sociales y económicas que ello conlleva.
  • Costes derivados de la defensa jurídica, que pueden suponer una carga importante si el proceso se prolonga.
  • Impacto emocional (estrés, ansiedad, sensación de indefensión) derivado de verse injustamente involucrado en un proceso penal.
  • Reputación afectada en su entorno personal, familiar o profesional, incluso en casos en los que posteriormente se demuestre la falsedad de la denuncia.

El sistema penal prevé, a través del artículo 456 del Código Penal, una vía para que estas víctimas puedan defender sus derechos y obtener reparación jurídica y económica.

¿Qué hacer si has sido denunciado falsamente?

Si te encuentras en la situación de haber sido denunciado falsamente, estos son los pasos que deberías seguir:

  • Mantén la calma y busca asesoramiento legal de inmediato. Un abogado especializado en Derecho Penal puede ayudarte a preparar tu defensa y a preservar tus derechos desde el primer momento.
  • Reúne pruebas que desmonten el relato de la denuncia: mensajes, testigos, vídeos, documentación, etc.
  • Colabora con la justicia. Acude a todas las citaciones, da tu versión de forma clara y evita cualquier comportamiento que pueda perjudicar tu defensa.
  • Si el procedimiento penal finaliza con sobreseimiento o sentencia absolutoria firme, consulta con tu abogado la posibilidad de presentar una querella por denuncia falsa.

Conclusión

En conclusión, la denuncia falsa no es solo una injusticia moral, sino también un delito recogido en el Código Penal español, con consecuencias jurídicas relevantes para quien la comete. Su existencia desvirtúa la función del proceso penal y pone en riesgo derechos fundamentales de las personas inocentes.

Si has sido víctima de una acusación falsa, la ley te protege, pero es fundamental que actúes con rigor, con el respaldo de un abogado especializado, y dentro de los plazos legales. Solo así podrás ejercer tu defensa de forma eficaz y, en su caso, reclamar las responsabilidades penales y civiles que correspondan al autor de la falsa denuncia.

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